La misión de Google no es exclusivamente mejorar los resultados de las búsquedas en Internet. Según un comunicado oficial de la compañía, también se propone revolucionar la forma en que su país sede, Estados Unidos, consume energía.
(DiarioTi, 6/10/2008) El ambicioso plan de Google es hacer que el consumo energético estadounidense esté libre de combustibles fósiles antes de 2030.
Los matemáticos de Google han calculado que no es aventurado pensar que la propia compañía sea independiente de los hidrocarburos antes de 2030.
Esto implica desechar totalmente el carbón y los hidrocarburos en la producción de electricidad dentro de 22 años. Cabe señalar que el plan de Google no implica descontinuar el uso de energía atómica y gas natural.
Los pronósticos de Google sugieren además la creación de numerosos empleos en la nueva industria medioambiental que surgiría. Google también recalca que incrementaría la seguridad nacional debido a que el país se independizaría de recursos extranjeros, a la vez que el medio ambiente mejoraría.
Para hacer realidad el plan, Google se plantea 3 herramientas relevantes.
El primer paso es optimizar las tecnologías existentes e incrementar su eficacia. Al respecto, Google cita su propia experiencia, indicando que sus datacenters figuran entre los más efectivos del mundo. Las experiencias de Google indican que las inversiones de 5 millones de dólares en medio ambiente han sido recuperadas en sólo 2 años y medio.
Google ha creado un sitio Web sobre el proyecto de datacenters eficaces (http://www.google.com/corporate/datacenters/).
Mediante otros proyectos, Google ya ha asignado aporte económico a empresas que investigan nuevas formas de energía como eólica y solar. Según Google, todo el consumo energético de Estados Unidos podría ser cubierto con estas nuevas formas de energía.
Google también propone aumentar el uso de automóviles eléctricos. Al respecto, la compañía se propone reinventar el uso de la red eléctrica. En tal sentido, indica que ésta podría ser más inteligente que los usuarios cargaran las baterías de sus coches eléctricos cuando la corriente esté especialmente barata. Otra alternativa es reciclar la corriente eléctrica no usada, incorporándola nuevamente en el sistema, cuando haya necesidad de ésta en otros lugares.
En su blog, Google describe numerosos de sus proyectos medioambientales (ver enlace al final del artículo).