(Cinco Días, 28/8/2008) Alemania se ha unido a la corriente inaugurada por el Reino Unido y que está muy cerca de aplicarse en España que supone el fin de la regulación nacional y única en el sector de las telecomunicaciones. Los países han comenzado a darse cuenta de que la competencia en el mercado de banda ancha es muy distinta dependiendo de las zonas y creen que ha llegado el momento de regular en consecuencia.
Reino Unido ya ha aprobado una nueva regulación en este sentido, España lo está estudiando y Alemania acaba de entrar en el grupo. El regulador alemán del sector anunció ayer que está considerando liberalizar la banda ancha donde hay competencia y ha pedido su opinión a los afectados.
La eliminación de la regulación permitiría a Deutsche Telekom prescindir de una oferta mayorista que dé a sus rivales la oportunidad de replicar sus servicios de banda ancha y acceder a su red. Eso será, según el regulador, en las zonas donde haya varios competidores con redes de alta velocidad.
Este movimiento ha sido largamente reclamado por los ex monopolios de cada país.