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(Baquía, 27/8/2008) Italia ha sido tradicionalmente uno de los destinos turísticos favoritos de millones de viajeros, aunque desde hace algunos años ha perdido protagonismo frente a países como Francia, España, Estados Unidos y últimamente China. Por eso, el gobierno italiano planea desde hace tiempo crear un gran portal turístico que informe y anime a los visitantes, según informa The Wall Street Journal.

Pero como suele suceder en Italia con todo lo que tiene que ver con la burocracia y las decisiones políticas, la cosa marcha bastante lenta. De hecho, aunque el objetivo es tener funcionado el portal Italia.it para la próxima primavera, por el momento la web no se encuentra disponible.

Y eso que el proyecto ya lleva cinco años en funcionamiento, desde que fue aprobado en 2003 por el anterior gobierno de Silvio Belusconi. Desde entonces se han gastado 45 millones de euros, pero sin ningún resultado visible.

El portal sería una réplica del Spain.info, en funcionamiento desde 2002 y que el año pasado recibió 67 millones de visitantes, ayudando a difundir la imagen de España como destino turístico internacional.

Pero el caso de Italia es muy diferente, Tal vez la lentitud del proyecto se deba a que hay demasiadas partes participando: varios ministerios durante dos legislaturas, las 20 regiones italianas, asociaciones de hosteleros y agencias de viaje. Sin contar con las tres agencias diferentes a las que se encargó el diseño y creación de la web…

Tantas opiniones y partes implicadas han llevado al colapso del proyecto, Por ejemplo, la discusión sobre dónde colocar las reservas hoteleras dentro de la web tuvo un año y medio paralizado el diseño. También hubo incompatibilidades entre las bases de datos y problemas para elegir el logo que identificase a la página.

Con todo, una primera versión del portal se lanzó en febrero de 2007, aunque recibió multitud de críticas por los errores que incluía. También se criticó que estaba obsoleto técnica y conceptualmente. Finalmente, en enero de este año se cerró la web.

La comparación con el éxito del portal español es inevitable. Para empezar, éste fue diseñado por una única compañía pública, Segittur, que trabajó directamente bajo las órdenes del Ministerio de Turismo. La consecuencia es que España ha logrado crear una marca internacional, mientras que en Italia han sido incapaces de crear siquiera una web.