Telefónica estrenó ayer a las 9.37 de la mañana el registro de lobbies abierto por la Comisión Europea, donde comunicó que en 2007 destinó 950.000 euros a defender sus intereses en la capital comunitaria.
(Cinco Días, 24/6/2008) El registro voluntario de lobbies, impulsado por el vicepresidente de la Comisión Europea, Slim Kallas, recibió ayer, nada más abrirse, el inestimable espaldarazo de Telefónica, una de las mayores compañías de Europa y la primera que no dudó en rellenar el cuestionario exigido por el organismo comunitario.
La operadora española, en una decisión que probablemente forzará a otras compañías a igualar su transparencia, incluso ha optado por declarar la cifra exacta que dedica a la actividad de lobby en Bruselas, aunque el cuestionario de la CE permite ofrecer una estimación en horquillas de 50.000 euros.
Telefónica cifra en 950.000 euros el presupuesto en 2007 de su representación ante las instituciones comunitarias. Según la normas del registro de lobbies, para las compañías con delegación en Bruselas, como es el caso de Telefónica, esa cifra debe incluir el coste asociado a su presencia física en la capital comunitaria (como alquiler o compra de un local o material de oficina) y el del personal implicado en su representación.
'Me alegra ver que los lobbistas o, para ser más exactos, los representantes de grupos de interés, ya están compitiendo por inscribirse cuanto antes', señaló Kallas nada más abrirse el registro. Y anunció que 'Telefónica ha sido la primera en completar el proceso'.
La operadora española incluso se dirigió por escrito a Kallas el pasado viernes para presentar ya su preinscripción. En la carta, a la que ha tenido acceso CincoDías, el director de relaciones internacionales de Telefónica, Alfredo Acebal, felicitaba a Kallas por su iniciativa y le expresaba su intención de 'presentar la inscripción electrónica tan pronto como la página web del registro esté completamente operativa el lunes 23 de junio'.
La promesa se cumplió a las 9.37 de la mañana. Y la compañía de César Alierta se ha garantizado así el simbólico gesto de suscribir antes que nadie el código de conducta de la Comisión Europea sobre la actividad de lobby ante las instituciones comunitarias.
La operadora se adelantó por sólo dos minutos al registro de Foratom, la patronal de las empresas vinculadas a la energía nuclear cuya inscripción tuvo lugar, según los datos de la Comisión, a las 9.39 de la mañana. Foratom, entre cuyos miembros figuran Endesa, Iberdrola, Areva o Eon, declaró haber destinado 1,6 millones de euros a su representación en Bruselas durante el último ejercicio.
Telefónica y Foratom, como el resto de empresas y organismos que vayan inscribiéndose, deberán actualizar periódicamente esos datos y garantizar su fiabilidad. El registro, que se puede consultar en internet, ofrece un formulario de quejas por si un competidor o un particular observa deficiencias o errores graves en la información. Si la Comisión considera probada la denuncia, puede imponer como castigo la suspensión temporal o definitiva de la inscripción, lo cual condenaría a un ostracismo de facto a la empresa sancionada.
Aun así, algunas organizaciones civiles, como Alter-EU (de la que forman parte, entre otras, Greenpeace o Amigos de la tierra), consideran que el registro debería exigir los detalles exactos del presupuesto destinado al lobby y los nombres y apellidos de las personas que lo ejercen. Curiosamente, ninguna de las organizaciones que reclaman más transparencia había facilitado sus datos en el registro al cierre de esta edición.
A última hora de ayer, ya se habían registrado cuatro consultoras; dos empresas (Telefónica y Pernod Ricard); tres patronales; seis organizaciones no gubernamentales; y tres organismos académicos o similares.
El departamento de Kallas prevé que la presión para inscribirse aumentará a media que crezca ese listado. 'El principal incentivo será la defensa de la propia reputación', aseguran. 'A quienes no se inscriban, siempre alguien les podrá pedir explicaciones'.
Abogados y ONG se resisten a registrarse
La apertura del registro voluntario fue acogida ayer con indisimulada hostilidad por parte de consultoras, despachos de abogados y organizaciones no gubernamentales, que temen revelar sus fuentes de financiación o sus tarifas. Los más remisos parecen los bufetes, que dicen encontrar dificultades para separar su labor de asesoramiento jurídico de la pura actividad de lobby. 'Sin embargo, muchos de ellos ofrecen el servicio de lobby en sus propias páginas web', se sorprenden fuentes comunitarias. Mayor estupefacción aún ha causado en la Comisión Europea la oposición al registro por parte de algunas ONG, que se niegan a revelar el número de miembros con que cuentan o la procedencia exacta de su financiación. A última hora de ayer, entre las 18 inscritos no figuraba ningún despacho de abogados.